Wednesday, September 20, 2017

Seguridad de gobierno, seguridad de Estado



Jorge Cruz, Caracas 17 de septiembre de 2017 

El lenguaje es muy flexible, cambiante, adaptable…

El lenguaje se nutre de variantes que surgen en el habla coloquial del pueblo, tiene dialectos por edad, sexo, regiones geográficas, formación académica, técnica, por actividad, entre otros, como forma de hacer cultura y comunicación. También puede ser utilizada por los agentes del poder para dominar, velar significados, seducir a sus adeptos e imponer agendas.

El dictador de la desaparecida Unión Soviética, Joseph Stalin lo tuvo claro, por ello escribió un texto en el cual plantea que el lenguaje es neutro, como mencioné arriba no es cierto, se puede usar para controlar y someter.

Venezuela no ha sido la excepción, como ha estado sometida a un régimen autoritario con visos de dictadura, la manipulación del idioma ha sido parte del arsenal para cumplir con dicho fin.

Los bandos en pugna han creado o transformado palabras o sus significados, ha habido una corriente mayor por parte del gobierno, ya que ha tenido control de los medios de comunicación, también ha invertido inmensas sumas en propaganda y la generación permanente de mensajes (solo revisemos los logos que utilizan los diversos entes oficiales para notar que cada cierto tiempo se cambia).
Que ha sido un gobierno mediático, no hay duda, solo contabilicemos la cantidad de horas en cadenas en estas dos últimas décadas, los ya mencionados cambios permanentes de mensajes, el control de quienes deben dar información, etc.

Regresando al tema del idioma, el manejo del mismo por parte del gobierno ha sido apabullante, hay cantidad de vocablos que han tenido nuevos significados, para mencionar uno solo: Terrorista.

El gobierno y sus partidarios, abogaron para que se cambiara el estatus de la Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia o FARC, de terroristas a beligerantes, sin embargo, a las protestas que se han realizado en el territorio venezolano no les ha temblado la mano, ni la boca, para tildarlos de terroristas, siendo que sus actos distan mucho de ello, señalaré una acción que realizaron innumerables veces la guerrilla colombiana contra poblaciones, en las cuales su principal objetivo era la policía, pero que generalmente culminaba con muertes de civiles, en algunos casos mayor que de policías, ellos utilizaban bombonas de gas llenas de explosivos y tuercas y otros objetos contundentes, que al explotar causaban múltiples heridas o muertes por la metralla. Un acto, criminal, como ese nunca fue utilizado por los grupos que protestaban.

A pesar que la diferencia es abismal se utilizó, básicamente con dos propósito: poder juzgarlos en tribunales militares, algo inaudito, pero que el manejo de la lengua y leyes permitió y segundo, poder justificar y alimentar a sus militantes ante las injusticias que se cometían, para que repitieran sin analizar.

Aquí entra un terreno en el cual se borraron los límites entre seguridad del gobierno y seguridad de Estado.

La Seguridad de Estado significa que sus habitantes tengan servicios adecuados: salud, alimentos, vías de comunicación, vivienda, teléfono (ahora hay que incluir internet), agua potable, luz, transporte, zonas verdes y de recreación, aire respirable, justicia, fronteras supervisadas, posibilidades de educación y, por supuesto, seguridad personal.

La Seguridad de Gobierno está relacionada a la permanencia en el poder, por ello tienen cuerpos represivos y de espionaje, aunque también se ha utilizado a grupos paramilitares, destinados a vigilar, acosar (se llegó al colmo de ser las mismas fuerzas represivas las que robaban a los que protestaban)  causar daños físicos, apresar, torturar o, incluso asesinar a los grupos de oposición, al pensamiento disidente.

Como podemos notar son dos tipos de seguridades, una está destinada a prestar un servicio, como Estado, a sus ciudadanos y la segunda es para controlar los movimientos e ideas de los ciudadanos, evitar que surjan movimientos que puedan poner en peligro la estadía en el poder.

En el país las diferencias, el gobierno,  con su actuar y lenguaje las ha mezclado, habla de seguridad de Estado cuando se está refiriendo a la permanencia en el poder.

Culpa al imperio de causante del desabastecimiento, de la falta de medicinas, sin embargo, al mismo tiempo envía toneladas de ayuda a las islas de Caribe azotadas por huracanes o tiene el tupé de enviar millones de dólares al imperio mismo. 

Señala que no se publican las “buenas” acciones o las positivas obras que realiza, pero no apunta que más del 80% de los medios de comunicación están en su poder o actúan coaccionados y los que no le son afectos, son obligados a encadenarse a sus transmisiones, que son diarias y en algunos momentos más de una vez y por varias horas.

Como vemos el bombardeo mediático es constante para imponer su lenguaje, para intentar confundir, para decirnos que está gobernando y no que solamente ha estado pendiente de reprimir para poder continuar al frente del país.

Doble discurso, con moral similar, que sus acólitos también reproducen y, por lo tanto, cómplices.

Sunday, September 17, 2017

Conejo agregado



Jorge Cruz, Caracas, 16 de septiembre de 201

Una de las formas como los economistas hablan de apropiación de plusvalía es un término llamado Valor agregado. El cual consiste en el procesamiento posterior a una materia prima y el nuevo precio obtenido de allí. Aclaro con un ejemplo, si yo produzco petróleo, pero no lo proceso sino que lo vendo a un país que tiene refinerías y ese país luego me lo vende en forma de subproductos, por ejemplo gasolina, lo más normal es que en esta operación yo seré un perdedor, pues el valor de la gasolina será mucho mayor que el precio por el cual yo negocié mi petróleo (cualquier parecido con lo que sucede actualmente en Venezuela con la importación de gasolina desde el imperio es mera coincidencia).

En pocas palabras, quien se beneficia es un tercero no mi persona.

En la cadena alimenticia sucede algo similar. Si yo consumo vegetales (actúo como un consumidor primario), voy a obtener un porcentaje de sus nutrientes, el resto es expulsado en forma de heces fecales, también esto es lo que pasa cuando consumo animales (actúo como un consumidor secundario) que se alimentan de vegetales, yo solo retengo en mi organismo un 14% de las carnes digeridas.

Hasta el momento no hay problemas, yo soy un consumidor secundario que me alimento de animales que cazo (donde el animal se ha autonutrido, sin mi participación) o crío (en este caso yo he destinado alimento propio o que digiera rubros que yo no puedo consumir, como sería el caso de una vaca alimentándose de grama, que contiene un alto grado de celulosa que mi organismo no está preparado para digerir).

Si me sugieren que utilice parte de mi alimento (verduras) para alimentar un animal que posteriormente yo deberé consumir, la operación no es tan sencilla.

Ya mencioné el valor agregado, allí quien se beneficia es el conejo, no mi persona, él se ha apropiado del valor agregado de mis verduras para engordar y luego, yo debo consumir su cuerpo para obtener un porcentaje bajo de sus nutrientes (parte de lo que el roedor consumió ha sido ya arrojado por su organismo, que yo tengo que deshacerme, porque ni como abono sirve).

Las verduras, que en muchos casos pudieran ser mi alimento, están siendo destinadas a alimentar un animal (esta es la manera como el capitalismo o capitalista o el sistema capitalista se apropia de mi plusvalía, cerca de un 70% de los cuatro rubros de mayor producción mundial: trigo, arroz, maíz y soya, son destinado a alimento animal, porque nos venden más caro la carne, leche o huevos que los mencionados vegetales).

Sin mencionar las otras secuelas de la cría: hay que destinar espacios para su cría, hay que crear jaulas, los animales expulsan heces, se enferman o en el peor de lo casos nos encariñamos y cambian de estatus, de cría de animales a mascotas (nadie consume sus mascotas, excepto en casos de crisis de valores).

En resumen, nuevamente el gobierno que se tilda de estar construyendo un socialismo, de estar adelantando una revolución nos quiere meter gato por conejo, nos está vendiendo que una práctica capitalista es la solución.

Preferiblemente es que nos alentara a ser consumidores primarios, pero…

Cada acción nos demuestra que su discurso es sólo palabras huecas, que para mantenerse en el poder apela a contradicciones que únicamente sirven para alimentar a fanáticos que no analizan, sino repiten cual MP3.

¡Definitivamente! A este gobierno le falta valor agregado en sus ideas.

Monday, July 31, 2017

Maniqueismo de izquierda

Jorge Cruz, Caracas, 28/07/2017
Nosotros los miopes, cuando no tenemos ayuda externa de unos lentes, nuestra distancia de percepción se reduce, el resto es algo borroso que no logramos distinguir, por ello preferimos explicarnos todo en función de lo que podemos visualizar claramente, sabemos que el mundo es mucho más que lo que percibimos, pero como no podemos ir muy lejos (visualmente) preferimos quedarnos con lo que tenemos.

Eso que se llama izquierda padece de miopía, su explicación de la realidad es limitada. Para aclarar mis argumentos voy a utilizar dos preceptos básicos del marxismo, fuente principal donde se sacian la sed.

Para empezar veamos cuando surge el marxismo. Carlos Marx vivió en el siglo XIX, una época de afianzamiento y crecimiento del capitalismo, tenía poco tiempo de haber aparecido las máquinas a vapor, un periodo de crecimiento de los obreros, que fueron abandonando el campo por diversas razones, y un momento cuando la explotación de recursos de diversas partes del mundo, que parecían inagotables.

CM ve esos movimientos de protesta contra la explotación a la que eran sometidos los obreros, pero también se nutre del entusiasmo entre los economistas de un mundo con recursos ilimitados.
Para facilidad analítica, más no explicativa o descriptiva de la realidad, redujo el mundo a un duelo de opuestos: ricos y pobres y que esa travesía terminaría con el triunfo de los pobres en una sociedad igualitaria, todo esto lo esgrime bajo sus propias palabras, en ser una método científico.

El paradigma que tocaré primero es lucha de clases.  Su esquema de Modos de Producción, donde construye dos polos opuestos: esclavos-esclavistas, nobleza-servidumbre y capitalista-obrero es, como lo expreso, un esquema bipolar, negativo y positivo, negativo el propietario de los Medios de Producción y positivo el explotado, son polos que se oponen y repelen. De allí surge el concepto de Lucha de Clases, sometiendo el discurso a un blanco y negro.

La realidad siempre rebelde nos dice que es mucho más rica que ello: hay hombres y mujeres, pero tenemos transexuales, incluso se habla de un tercer sexo; tenemos un reino animal y vegetal, pero hay 5 reinos, tenemos hacendados y campesinos, pero también capataces; entre otros miles de ejemplos; en pocas palabras, hay más de una dualidad en la realidad.

Ahora, casi dos siglos de por medio, más aún se notan que ese esquema, no es más que un esquema: hay en los países hay sectores medios que han crecido enormemente y las diferencia entre obreros de diferentes países también es enorme, al mismo, tiempo que están bajando los números de obreros, siendo sustituidos por robots y operarios, que nada tienen que ver con un obrero rural, por ejemplo.

También vemos que las LUCHAS no solamente por reivindicar los derechos de los obreros, sino que han surgido muchos otros movimientos: feministas, ambientalistas, LGTB, étnicos, religiosos … que no tienen lugar en ese esquema reduccionista a dos polos opuestos.

El segundo paradigma es relacionado al periodo final de la humanidad (no se puede negar el carácter religioso, el paraíso, eso fue tratado en un libro de Edgardo Lander, entre otros temas, en: Contribución a la crítica del marxismo realmente existente, Fundación El Perro y la Rana, 2008) y mi tema es por otro lado, arriba mencioné que CM se sumó a la lista de entusiastas por los recursos ilimitados.

Por ello promete una era donde todas las necesidades pueden ser cubiertas, donde no existirán ni explotados ni explotadores. Como podemos notar, todas las necesidades tendrán suministro, es decir, la naturaleza o el planeta en general estará a nuestros pies para dotarnos de lo necesario.

Voy a hacer un paréntesis, porque es un tema que los marxistas se engrinchan cuando escuchan, los planteamientos de Thomas Malthus: la población crece geométricamente y los recursos aritméticamente, con el tiempo esos lleva a una escasez de recursos, es posiblemente uno de los primeros pensadores que rompe con el entusiasmo que ha reinado desde el siglo de Marx y continua hasta nuestros días, algo que van a retomar los economistas que tienen una visión ambientalista y que los biólogos y ambientalistas también tienen en sus argumentos.

El pasar del tiempo nos ha demostrado que los recursos naturales, ya sean renovables como las árboles o un grupo de ellos (un bosque), por ejemplo, o no renovables (con mayor razón aún) son finitos, podemos agotarlos sin no hacemos un uso sustentable de ellos; por lo tanto, el Comunismo, esa última etapa humana, es un espejismo, un discurso político y no más de allí. Las sociedades han y seguirán colapsando cuando no hacen un uso amigable de su ambiente, las guerras y conquistas por recursos son parte del juego que ha prevalecido y seguirá (recomiendo la lectura del libro de Jared Diamond Colapso, Editorial Random House Mondadon S.A., 2006). No habrá plena satisfacción de necesidades y, extensión, no habrá comunismo, como lo promete la religión marxista.

Si llevamos la primera premisa debatida al terreno concreto, podemos ver que se cristaliza en los partidos políticos, son ellos quienes se han encargado de mantener viva esa propuesta seudocientífica y absolutamente política. Tal vez la mejor ilustración es el Partido Comunista de Venezuela, entre sus fundadores y/o miembros de peso se encontraban los hermano Machado, que pertenecían a la “rancia” burguesía, un grupo de clase media (para utilizar su terminología) y obreros. Es decir, los que llevan a adelante el proyecto de difundir e instaurar (por medio del acceso al poder) son policlasistas, no son proletarios para imponer la dictadura, sino son grupos de diversos estratos que se unen en la venta de su proyecto.  

Pero revisemos otro accionar de la “izquierda” mundial, ella cae en ese facilismo de la dualidad antagónica, si hay una revuelta liderada por simpatizantes de sus tendencias ideológicas, es tratada por sus analistas como una rebelión contra la opresión por parte del pueblo, que puede ser desde resistencia pacífica hasta violenta, con las armas o guerrillas. Ahora, cuando es de signo contrario, siempre se alega que es empujada por fuerzas externas, generalmente se habla del imperialismo.

Un esquema reducionista: si están conmigo es un movimiento interno, si es en mi contra, son por aupamiento y soporte de fuerzas externas.

El simplismo encerrado allí se expresa en un desprecio y condena por las protestas de grupos contrarios al gobierno de “izquierda”, no solo se les tilda de vendidos a la ideología foránea, sino que son comprados (reciben dinero) por esos mismos países con poder; claro está que cuando era esta izquierda la que protestaba, no menciona si también recibía fondos externos ¿será que el ladrón juzga por su condición?

Se habla de pueblo, pero sólo mientras los respalde, luego es un gentío infiltrado por la ideología burguesa y financiado por el imperio o peor aún, son un grupo de terroristas, aunque sus protestas sean pacíficas.

También resulta patético argumentos contra el imperio por la fluctuación de los precios del petróleo del gobierno venezolano, si bajan es por culpa del imperio y si suben es por la acción del difunto comandante eterno. Una simplicidad tan pasmosa que mi reacción regular es hilaridad.

Un maniqueísmo enfermizo es lo que en esa llamada izquierda existe, como vemos, y unos diagnósticos, en líneas generales, predecibles y pobres. 

Creencia en un Edén, que no pasa de más que un discurso político, marketing de ilusiones, por lo que sus militantes responden cual devoto ante su deidad y un esquema de desarrollo basado en la destrucción, en la guerra (lucha de clases), que solo será innecesaria al alcanzar la gloria comunista.

Definitivamente la izquierda o los que se titulan como tal necesita de prótesis que amplíe su visión de realidad, que se desprenda del anquilosamiento a los que los ha sometido un enfoque que se quedó en los anaqueles de la historia, anquilosada y esclerótica; en fin que deje de ser un fanático religioso, ya que hay más que blanco y negro como colores, que la gama es más cercana a lo que percibimos y mucho más excitante y expande y actualiza sus argumentos.

¡Aprovechen! ¡Se regalan anteojos!

Explotación ¡con seguro!



Jorge Cruz, Caracas 02-07-2017

Una de las premisas principales del marxismo es que la explotación del hombre por hombre, en el capitalismo se realiza mediante la extracción de plusvalía al trabajador. En el tomo I, de El Capital, Carlos Marx expone que el trabajador genera más valor de uso del que recibe a cambio como pago, que esa diferencia es apropiada por el dueño de los medios de producción, que para su caso está representado por el capitalista.

Lo que nunca manifestó en su obra es que también el Estado puede realizar este usufructo, aunque, como él no se beneficia, sino los que están al frente de su poder.

Veamos cómo funciona este aprovechamiento.

Seguro Social
El Seguro Social es un fondo que crea el Estado, para garantizar, dos tipos de servicios: por un lado, poder dar atención de salud a todos los trabajadores afiliados (generalmente es obligatorio que toda empresa inscriba a sus empleados y, en algunos países, que los trabajadores independientes hagan su subscripción y pago de cuotas mensuales) sin costo alguno; el segundo lado es garantizar una pensión al alcanzar una determinada edad.

¿Cómo puede garantizar tener suficiente dinero para “pagar” a sus afiliados? Hay dos formas: la primera es por medio de la cotización mensual de sus afiliados activos, es decir, los que están trabajando “financian” a los que están retirados; la otra modalidad es, como preparación a largo plazo de la anterior, aprovechar cuando la edad promedio de la población es baja y, que por lo tanto, debe haber un alto número de trabajadores y un mínimo de pensionados, lo que permite acumular para cuando suceda la inversión de la edad promedio.

Los fondos pueden también ser privados, hay países donde son empresas privadas las que crean los fondos de pensiones para que al momento del retiro puedan favorecerse de un monto preestablecido.
Los fondos, como toda inversión incurren en riesgos, ya sean privados o públicos (hasta hace poco tenía la convicción que los públicos no participaban en tales males, pero recientemente me enteré que en Puerto Rico, el gobierno se declaró en quiebra financiera y que los principales afectados eran los pensionados). Los riegos son, voy a mencionar solo dos de ellos, que el fondo, por mal manejo, especulación o simple corrupción, se declare en quiebra y con ello deja sin ningún tipo de ingreso a los pensionados al momento o los que estaban cotizando; el otro riesgo que voy a mencionar es que la inflación sea tan fuerte en el país que el monto acordado sea insuficiente para garantizar un mínimo de ingreso para la manutención de sus pensionados.

Revisemos el caso de Venezuela. Hasta el gobierno de Chávez el servicio médico del SS, aunque había venido decayendo con el tiempo, era aceptable, también muchas empresas y entes del Estado habían recurrido a un seguro privado (generalmente conocido como HCM, para poder tener acceso a otros servicios que eran algo deficientes en los públicos), en el 2004 decide el difunto abrir los servicios para todo el mundo, las clínicas del SS pasan a ser clínicas populares, esta apertura, que era un beneficio para un importante grueso de la población, con el tiempo el deterioro ha sido enorme, porque no atiende ni a la población previa ni a todos los recién incorporados de manera adecuada. El HCM que era un apoyo para las intervenciones mayores, se ha convertido en la casi única fuente de atención a los trabajadores.

Con relación a la pensión. A diferencia de otros países, en esta nación hay dos tipos de retiros, la pensión que se alcanza a los 55 años para las mujeres y 60 para los hombres, con un monto similar al salario mínimo vigente, para la cual se hacen cotizaciones mensuales que representan el 11% del salario por 75 semanas, es decir un poco más de 14 años.

La jubilación se hace con un porcentaje del monto del salario devengado, que se incrementa con la cantidad de años de trabajo, en los entes del Estado se pueden solicitar desde los 20 años de servicio, en la empresa privada, generalmente a partir de los 25 años. Sin embargo, hay que señalar que en la empresa privada, tiene que haber trabajado en la misma empresa por la cantidad mencionada, a diferencia de la carrera de funcionario público, que puede cambiar de entes públicos y sigue acumulando. En pocas palabras, si una persona ha trabajado menos de 25 años en una empresa nunca tendrá derecho a una jubilación.

Tenemos otro problema mayor, en el sector privado son pocas las empresas que pueden asumir la jubilación de sus trabajadores, solamente las de grande tamaño. Las empresas pequeñas no lo asumen, con lo cual a cierta edad las personas quedan con un ingreso reducido al salario mínimo o pensión. Las empresas grandes, para sus empleados que tienen ingresos varias veces el salario mínimo, al estar cercanos a su paso a la edad de su jubilación, les proponen un retiro con un “bono” que pueda ser atractivo para que renuncien a su jubilación, que pueden aceptar o no.

Otro problema más, Chávez decidió que una de sus misiones (Amor Mayor) incorporara a la pensión a personas que tenían la edad pero nunca habían cotizado o era muy poco y oneroso para poder pagar las cuotas faltantes. Esto se realizó con fondos del fisco, es decir, nunca se preparó para la autofinanciación al SS lo cual es una carga más al presupuesto de la nación, que como depende de los precios del petróleo, en época de bonanza no molesta mucho, pero cuando las vacas son flacas, se siente o resiente, ya que se debe destinar montos que pudieran ser de beneficio para toda la población.
 A los pensionados en el exterior, hasta finales del año 2016, se les remitía en la moneda local, dependiendo del país de asiento, un monto equivalente a la pensión en bolívares. Esto se hacía con el tipo de cambio más bajo, de los diversos que ha tenido el país, pero desde la fecha señalada no se les ha enviado más las remesas con lo cual se ha incurrido en una falta grave a un derecho a esas personas que decidieron pasar sus años restantes en exterior y se acogieron a un convenio que la república asumió. No es un regalo, como han querido vender algunos personeros del gobierno, es un derecho, porque una inmensa mayoría de ellos cotizó o cumplió con lo exigido por ley.

Ya he apuntado que los países deben aprovechar cuando el promedio de edad es bajo para incrementar el fondo, Venezuela, según el último censo, tiene un promedio de 26 años, se ha incrementado poco a poco, pero no hay una política de Estado para tal fin, con lo cual, a largo plazo puede significar, si se continúa con las líneas actuales, que no hay dinero suficiente para la pensión y menos aún para una pensión. 

El gobierno, en los dos últimos años ha hecho una inversión de lo devengado por los trabajadores, el salarió mínimo es menor al Cesta Ticket (bono para adquirir alimentos), llegó a estar en un 300% por encima, con el nuevo aumento desde el 1 de julio de 2017, bajó a un 60% superior. Los bonos, en casi todos lados, no son considerados como salario, por lo que el monto de su jubilación se deteriora; es menor cada vez más.

El último problema, en esta nación no se permite tener como alternativa los fondos privados, con lo cual se está condenado a una alta parte de la población que no tenga la posibilidad de una jubilación decente., ya sea porque no trabajo la cantidad de años suficientes en lo público o privado o lo haría realizado de manera independiente.

En resumen a este primer punto, la cotización mínima para una pensión es de un poco más de 14 años, sin embargo, tiene que trabajar por al menos unos 6 años más para poder pensar en una jubilación, con lo cual el SS continúa percibiendo por más años plusvalía, entre mayor cantidad de años, mayor es la retención que acumula el SS, aunque hay algo extraño en esto, si una persona continua trabajando luego de pensionada (tenga las razones que tenga) continúa cotizando al SS, por un lado percibe pensión y por el otro le descuentan la cotización del SS. Si esta persona no obtiene jubilación, por alguna de las razones arriba mencionadas, ese monto que debió contar como su retiro se desaparece, más plusvalía que no percibe el trabajador. En estos momentos si eres un pensionado en exterior, tu plusvalía queda para beneficio de otros que no eres tú. El gobierno al aumentar, por encima y hasta casi tres veces el salario, causa un deterioro de la calidad de vida al largo plazo del trabajador, una plusvalía que se esconde bajo el monto de unos bonos, que a la larga nunca verá el trabajador. Por otro lado, al no permitir que el trabajador tenga la alternativa de un fondo privado, elimina la posibilidad de una jubilación a un número importante de trabajadores (si ponemos a un lado el riesgo que está presente en ello). El país no ha aprovechado la edad joven promedio de su población para que realmente funcione como un fondo de pensiones el SS. Es decir, el gobierno no ha evitado la explotación o acumulación de plusvalía, tanto privada como por el Estado, para beneficio de capitalistas y funcionarios que si aprovechan su alto nivel para hacerse de los recursos del Estado.

Salario
 El salario está compuesto de varias partes, el monto que se percibe mensualmente, más los beneficios: tales como bonos de transporte, CT, por antigüedad, grado educativo, prestaciones sociales, utilidades, vacaciones, bono por hijo, becas a los hijos, cursos de adiestramiento o formación, caja de ahorro, HCM, entre otros.

Voy a concentrarme en el monto recibido. Este monto tiene descuentos: cotización al SS, Impuestos Sobre La Renta, Ahorro Habitacional y Paro Forzoso.

Con conexo al SS ya se ha mencionado. Vamos a la retención del ISLR. La cantidad retenida mensualmente va a depender del ingreso, si se pasa de las 3.000 unidades tributarias se realiza la retención. Pero, hay algo increíble, si se ha realizado la retención y el gobierno decide incrementar a más de 3.000 UT, que puede hacer que cierta cantidad de personas queden fuera del pago del impuesto, el monto retenido NUNCA es devuelto, si se ha pagado y no aplica, tampoco. Hace unos años atrás, por un contrato con una empresa me hicieron retención, al final del año, mi monto estaba fuera de las personas que calificaban para pago de impuesto, la respuesta fue que quedaba ese monto para, el año siguiente, en caso de ser contribuyente, se descontaría, lo real fue que pasaron más de dos años y al momento de tener que pagar el impuesto solicité que se descontara, la respuesta fue: eso es válido por dos años, en breve, no me devolvieron el dinero, otra plusvalía que se va de mis manos o de la de otros afectados en similares casos.

Del AH no hay mucho que argumentar, es una cantidad equivalente a un 0,5% del ingreso bruto, cuyo fin es poder tener para cuando se desee, la posibilidad de un crédito para adquisición de vivienda, algo cuyos montos son risibles en este momento, no da ni para poder comprar una vivienda de media habitación. En caso de no ser utilizada, cuando la persona se retira le es devuelta la cantidad ahorrada.

Hay otro monto restado para un fondo de Paro Forzoso, que es una ventaja en caso que una persona sea despedida y no pueda encontrar trabajo en los tres meses subsiguientes. Es una compensación que permite que un trabajador pudiera tener un pequeño salvavidas en caso de despido, aunque adolece de una irregularidad, no importa la cantidad de años que se cotice, siempre va a ser reconocido un salario mínimo por tres meses, lo justo sería que fuera incrementándose a medida que esa persona cotizara más tiempo. Una plusvalía que queda en manos de otros.

Por último, buena parte de los salarios que devengan los “servidores públicos” está por debajo de lo que similar cargo en la empresa privada. Los “servidores públicos” están subpagados en muchos de los entes del Estado o, podemos afirmar, que el gobierno está succionando plusvalía a sus trabajadores. 

Como podemos notar son diversas las formas como el Estado, o mejor dicho, sus administradores nos quitan plusvalía, algo que nunca es devuelto, es decir, explotación del hombre por el hombre en versión del Estado. 

Falta preguntarnos: ¿Qué ha hecho el gobierno, que se autotitula como revolucionario, que está construyendo el socialismo, como paso previo al comunismo, para eliminar la explotación del hombre por el hombre, con una Ley Orgánica del trabajo aprobada bajo su mandato? La respuesta está arriba.

Son 18 años en el poder, con mucha verborea y pocos cambios que realmente intenten eliminar el capitalismo, solo han destruido la producción nacional para tener un Estado más fuerte (siempre pensado o deseado que el flujo de dinero por el petróleo sea gigante y por seculum seculorum) e importado para que la explotación del hombre por el hombre se haga en otras latitudes. No es combate al capitalismo, sino esconde bajo la alfombra, tras grandes campañas mediáticas y que sea fuera de las fronteras.

El tiro por la culata

Jorge Cruz, Caracas, 22/06/17

Hace algo más que una semana se hizo un operativo en los llamados Edificios Verdes en El Paraíso, con un despliegue de película de terror de equipos antiterroristas a un conjunto residencial. Días antes comenzó la preparación sicológica del golpe: por todos los medios de comunicación a manos del gobierno o que actúan como voceros, a pesar de ser privados, que en dicho lugar estaba establecida una célula terrorista que era comandada por una mujer, que en la última protesta, habían herido a 5 funcionarios con armas largas.

La invasión se hizo con seis mil (6.000) miembros de cuerpos represivos (e.g. Guardias Nacionales, policías, cuerpos especiales de seguridad como SEBIN, entre otros). Ingresaron violentando y destruyendo los portones de seguridad, una vez dentro, iniciaron destrozos masivos de vehículos (rompiendo vidrios, disparando a sus cauchos y/o robando lo que en ellos había como baterías o radios); rotura de puertas, cámaras de seguridad, lámparas de emergencia que alumbraban las escaleras o las de los pasillos comunes, ascensores y posteriormente puertas de viviendas, en las cuales iban desde males menores como volar la cerradura con armas de fuego, hasta tirar los que había en ellas, como estantes con adornos de porcelana o vidrio, vajillas o licores, pasando por pantallas de televisores y las vitrocerámica de las cocinas hecha añicos, robos de dinero, celulares, computadoras y alguna que otra cosas que consideraran valiosa.

A las personas, que habían desde niños en edad de lactancia, hasta mayores de edad con dificultades de movilización, cada uno con su trauma pos evento: niños que se despiertan en medio de la noche llorando o se hacen pis en la cama, siendo que ya tenían tiempo que era etapa superada, hasta, por ejemplo, una pareja de ancianos que no se atreven a denunciar por evitar una retaliación (hay otro caso, de una pareja que no denuncian porque, aunque le robaron los dólares y desaparecieron el pasaje, se mudan pronto fuera del país y no quieren que, como ya es conocido, su pasaporte aparezca como robado y no puedan viajar fuera) o, peor aún, una mascota herida en un ojo que tuvo que ser sacrificada y tres perros y un gato “sin dueño” que eran mantenidos por la comunidad.

Lo logrado con esa escandalosa muestra de venganza, saña y castigo es pírrico: 23 detenidos, un escudo de MDF, una pistola, una escopeta vieja y oxidada, y cientos de botellas llenas o con gasolina (para ser utilizadas como bombas molotov).

Pero este balance queda aún más desteñido porque de ellos 19 personas eran menores de edad; es decir, solo cuatro personas son mayores, uno de ellos, una mujer embarazada, fue detenida, golpeada por mujeres de los cuerpos represivos, a pesar de la advertencia que estaba; a otros, dos, uno hijo de una conserje, les sembraron la mencionada escopeta (con toma de fotos incluidas), que, por cierto, no mostraron ni una sola bala para justificar su uso, y el último caso, algo común con la justicia nuestra, pagaron sus padres y está libre. Como vemos la justicia antes y ahora solo es efectiva o se aplica a los que no tienen poder económico o político, no han cambiado las cosas aunque nos intenten vender ello.

Como síntesis, no hay una líder apresada, la mujer que supuestamente tenían identificada no existe; las armas largas que hirieron a los miembros de las fuerzas represivas tampoco y la célula terrorista, se desvaneció como la sal en el agua (solo les dejó un sabor amargo), si, en cambio, les ha dejado una imagen de uso desproporcionado de la fuerza, de mentirosos, de usos de la propaganda para difundir rumores que intentan justificar sus acciones, de violencia gubernamental desbocada, de robos y otras acciones, que no deben hacerse en casos de búsqueda de “terroristas”.

Un vandalismo, saña, ultraje y muestra de odio que deja palidecido a los que cometieron los adecos.

En pocas palabras, si quisieron demostrar que había terroristas es un tiro por la culata ¡de risible a patético resultado!

Nota: El asedio y acoso a los Verdes y otros grupos de vivienda tiene otro matices. Los servicios se han deteriorado de manera impresionante: la basura pasa hasta semana y media sin ser recogida, el ABA o Internet bajó su velocidad a casi cero (que en algunos momentos es similar a ello) y el último castigo ha sido la luz, el pasado 20 de junio, hubo corte de suministro de electricidad, casualmente, en aquellos conjuntos residenciales que han participado activamente en las protestas, la falta de suministro fue desde 18 horas hasta 48.

No se puede negar que los adecos son niños de pecho ante tanta maldad, el odio, venganza y resentimiento superlativo a cualquier gobierno anterior. Aún tienen discursos que llaman a la paz y el amor. Solo el Tartufo es su similar.

El terrorismo como cultura


Jorge Cruz, Caracas 14 de junio de 201

Esos grupos que se autodenominan de izquierda, en Latinoamérica, tiene un modus operandi que es como una marca de fábrica: se han dedicado al robo, en especial de bancos; la extorsión o cobro por secuestros o vacunas; el narcotráfico, cobros por protección de espacios; a fomentar el odio y la envidia por el diferente, principalmente si tiene algo de dinero (los tildan de capitalistas y explotadores) o son xenófobos, aparados en un discurso patriotero;  son intolerantes contra el que piensa de otra forma; son guarimberos que trancan vías, queman objetos diversos o incluso vehículos y se tapan con capuchas; en otros casos han sido o son guerrilleros que comenten actos terroristas, con asesinatos o ataque que produce “daños colaterales” (como eufemísticamente se llama los muertos civiles que no tenían nada que ver con el ataque); tienen gustos por las armas, las estructuras militares (no olvidemos la célula leninista, tan extendida en su uso por los Partidos Comunistas) y la figura del caudillo; culto a la personalidad arraigado (Carlos Marx y su anquilosada teoría política, Mao, Lenín, Fidel Castro o el más reciente, Hugo Chávez); deseos por las dictaduras, algo que en la teoría marxista es un punto de honor: la dictadura del proletariado; por último, reclutan jóvenes o bachilleres, que pueden ir a la guerrilla o simplemente son los frentes de batalla en sus protestas.

Diversos miembros del alto gobierno venezolano no han escapado a ello, algunos comenzaron su militancia siendo párvulos estudiantes de bachillerato, también usaron capuchas y quemaron vehículos, muchas veces causando apremios económicos al conductor que era el propietario, otros participaron en secuestros o robos, que tiene otra versión: corrupción, robo al erario público, entre otras perlitas.

En pocas palabras, el terrorismo, vandalismo, corrupción (aprovechamiento de dinero mal habido), intolerancia, xenofobia (ha sido común el sobreinflar el número de inmigración de colombianos para así poder crear la percepción que ellos son culpables de muchos de los males del país) e incluso la utilización de chamos ha sido y es su norma, es parte de sus valores, de su cultura.

Si detallamos un poco más algunas una de esas conductas podemos observar que no son ajenas mis afirmaciones: la corrupción ha sido su norma, tenemos a Lula y parte de su círculo cercano acusado de peculado en Brasil, de los Kirchner en Argentina ni hablar, en Nicaragua, Cuba, para solo nombrar algunos casos, es más que notoria y, por último  Venezuela, donde billones de dólares que han ingresado al Estado ha desaparecido o mejor dicho, ha aparecido en cuentas en el extranjero de personajes que han u ocupan altos cargos en el poder, o son propietarios de viviendas y otras inversiones, como empresas con las cuales hacen negocios con la importación de alimentos, una de las formas más comunes para robar, o utilizan a testaferros. Del reclutamiento de jóvenes, han sido diversos las reformas a la educación, desde la primaria hasta el bachillerato, para “formar” ideológicamente a sus militantes (lo patético es que a pesar de todo ese esfuerzo las protestas están llenas de esos “hijos” de la revolución, por ello es que unas de las últimas cortinas de humo ha sido el acusar de usar a los chamos en las protestas, cuando esta ha sido una de sus costumbres, que ahora “legalmente” hacen por medio del sistema educativo).

Recientemente ha habido protestas en variados puntos de la geografía venezolana, las cuales han sido reprimidas con violencia, que ha ido en incremento al notar el gobierno que no se han detenido y que no lo harán. Ya hay un dato terrible de muertes, heridos con bombas lacrimógenas, ya sea con fracturas de cabezas o miembros, heridos con fuertes hematomas por el impacto de las mismas, pérdidas de ojos por disparos de perdigones, heridos por perdigones “aliñados” con metras, pedazos de cabillas u otros objetos contundentes, también hay robos de dinero, celulares, zapatos, entre otras pertenencias, hay otro dato terrible torturas, encarcelamientos (algunos con órdenes de libertad que no se cumple) con hampa común. El gobierno calcula que son cercanos a los 70 los muertos, pero allí no incluye otros que no son muertes directas, como asmáticos ahogado por los gases, hay más de mil heridos con variados grados de gravedad y más de tres mil detenidos, con más de 1200 aún bajo arresto. Son datos fuertes que no demuestra que ha habido casi mil detenidos por mes (son tres meses de protestas), más de 300 heridos por mes y más de 10 muertos por mes. Sin contar, los daños sicológicos que han producido en los torturados, que es un dato aún no contabilizado en su totalidad.

La última REPRESIÓN, hay que ponerlo en mayúsculas, se realizó hace un día en un conjunto residencial en El Paraíso, popularmente conocido como Los Verdes, fue un asalto tipo Swat, con una tanqueta que abre camino al romper las rejas que impiden el paso de vehículos o personas, luego ingresa un numeroso grupo de individuos vestidos de negro, con capuchas, sus armadura, cual cachicamo, y armas largas; es un asalto por diversos accesos al conjunto residencial, posteriormente comienzan los abusos: destrozos de rejas de ingreso a los edificios, rompen todo a su paso, cámaras de seguridad, lámparas, vidrios de una garita de vigilancia vacía desde hace años, vidrios de vehículos, robos de radios en los vehículos, daños considerables en los ascensores, cateo de apartamentos, en los cuales, si encuentran dinero se lo llevan además de celulares y equipos de computación (los cuales son expropiados, ese eufemismo para esconder un robo, porque nunca son devueltos y que posiblemente se repartan como un botín de piratas), disparo a una mascota y otros destrozos en las viviendas.

Lo cumbre de todo esto es que Carlos Pérez, director de la Policía Nacional Bolivariana haya dado unas declaraciones en las cuales afirmaba que el asalto se hizo con apego a la Constitución. Yo solo le preguntaría que me señalara en cual artículo de la carta magna  se expone que se puede hace vandalismo con los vehículos, artículos del hogar, como muebles o televisores, o que los robos son permitidos, que las mascotas deben ser asesinadas o por lo menos el intento de ello, dando a objeto de duda la irrupción a una propiedad privada sin ninguna orden para ello, el reventar cerraduras en las viviendas que no abrían con armas de fuego, fuera por miedo o cualquier otra razón, entre otras linduras que dejó dicha “actuación legal”. ¿Será que estamos hablando de diferentes documentos?
Como dato curioso: una de las formas comunes de actuar, luego de una “victoria”, es mostrar lo incautado o hacer alarde de la misma; el gobierno venezolano se ha caracterizado por acusar sin mostrar o demostrar pruebas o evidencias, solo acusa (muchas veces ha sido desmentido por la realidad), en el caso del asalto señalado, antes de el mismo y como forma de allanar o preparar a los habitantes la república, por diversos medios, desde Maduro, medios de comunicación y programas dirigidos por Diosdado Cabello y Mario Silva, le dedicaron minutos para ripostar que en ese conjunto residencial había una célula terrorista dirigida por una mujer; luego de la violenta irrupción y violación de todos los DD.HH. No mostraron su botín, porque era pobre: 23 detenidos, 80 % hijos de la revolución, en pocas palabras, menores de edad, una pistola de un militar retirado y padre de uno de los detenidos, y varias gaveras de botellas y bombas molotov ya preparadas. No habían armas de fuego como se arengó en muchas ocasiones, tampoco dinero producto de su financiamiento (si robaron dólares a varias personas, entre ellas una pareja que recién se habían retirado como trabajadores de mantenimiento en el conjunto residencial, porque se iban al extranjero). Tampoco mostraron los daños que causaron a viviendas como rompimiento de cristalería, televisores y otros enseres. Menos aún la líder de la célula. Mucho teatro para cometer una canallada.

Fue un acto de vandalismo total, de saqueo, de aterrorizar a los habitantes de ese conjunto residencial, creo que todos sabemos que la violencia solo genera más violencia, la escalada del gobierno solo le veo dos vías: acelerar su caída, por el continuo goteo de alejamiento de sus fieles o,  la otra, justificar un golpe de Estado. El terrorismo nunca ha aplacado los malestares, solo hace que se retraigan temporalmente los oprimidos hasta dar un mejor zarpazo o, peor aún, hace que se apertrechen más y que la respuesta sea con similar grado de violencia.

Vale preguntar: ¿quiénes son los verdaderos terroristas?

Aunque como señalé si los que están en el gobierno tienen como cultura el terrorismo, no se podía esperar otro tipo de conducta, es en ello que son expertos, es lo que su andar por la vida les ha enseñado, han intentado tomar el poder por medio de las armas, protestas, saboteo, asesinato, terrorismo, ahora en el poder solo tiene la represión como respuesta, como forma de gobernar, por ello han importado recientemente 150 tanquetas más, no es comida lo importante, es armarse para aterrorizar, para abusar cada uno de los DD.HH.

Venezuela en estos momentos se traza, entonces, un camino hacia una guerra civil, porque sus gobernantes, que han sido ineptos para mejorar las condiciones de vida, pero si tienen experticia en aterrorizar.

La vida de los otros no vale nada, de los enemigos (no son contrincantes u opuestos en un debate o modelo de país, son los que hay que desaparecer, ya sea físicamente, que se vayan del país o económicamente, cuando no pueden encontrar trabajo porque están vetados sus nombres). Es un régimen que solo conoce de la violencia como forma de gobernar y “desarrollar” a la nación. Es el miedo como institución de hegemonía.

Como bien me decía mi abuela, que en paz descanse: “La mona aunque se vista de seda, mona se queda”.