Wednesday, October 7, 2020

Palabras mágica y no tanto

Jorge Cruz, Caracas, 07 de octubre de 2020

Hay palabras mágica, no estoy hablando de Abracadabra o similares, ¡NO! Me refiero a ciertas palabras o frases que generan orgasmos mentales, nada que ver con el sexo.

Una de las expresiones del fanatismo es lo que algunos autores han llamado posverdad, es decir, expresiones en los cuales lo importante es la emocionalidad que despiertan en el interlocutor más que la verdad en si.

Ciertos términos que son casi de uso obligatorio para demostrar que se milita en x partido o iglesia y, del otro lado, los lectores que llegan a éxtasis de júbilo al escucharlas o leerlas.

Lo interesante es el juego que tienen en lo imaginario esas palabras, parecen una ruleta, puede caer en cualquier número. Por ejemplo, IMPERIO, para algunos  hay momentos en los cuales lo sobrevaloran y asemejan a un dios: controla todo y está en todas partes, es un todopoderoso ente maligno que huele a azufre; también se le devalúa: con todo su poder no ha acabado con la producción de droga en Colombia; para otros es el amigo beneficioso, el redentor, el que puede quitar y vencer al enemigo; unos sueñan con vivir en su territorio por su prosperidad; otros lo ven como un invasor que hay que aborrecer.

Como vemos hay posiciones opuestas, en algunos casos con expresiones generalizadoras, de poca sustancia. Hay una tendencia maniquea, que simplifica el contenido y su análisis, se va de un extremo al otro, se pasa de endilgar poderes supremos y luego a ser un hazme reír.

Veamos como pasa en la vida, no en los discursos: Venezuela y su relación con el imperio, sobre todo desde que el chavismo asumió el poder.

Por un lado, se le acusa de todos los males que sufre dicha nación. Desde que los obreros petroleros se organizaron y poco después surge el Partido Comunista, se habla de una inminente invasión para apropiarse del oro negro (años 40 del siglo pasado), este discurso se arreció una vez que Chávez asume el poder, pasan los días, semanas y años y aún no llega el lobo. Lo más patético es que durante todos estos más de 20 años bajo el mandato del chavismo, por un lado se acusa de estar tramando un envío de tropas con sus maquinarias, por el otro, se siguió vendiendo el petróleo que es la energía que mueve esa maquinaria (una imagen que nos desnuda lo falso de tal narrativa); tenemos dos puntos más aún, desde el año 2012 hasta principios del 2019, quien surtió de gasolina, en ese momento esta nación bajó a niveles mínimos su producción interna, fue el propio imperio y, además, se acusa de ser el causante de los malos servicios, el deterioro económico, entre otros, por un bloqueo.

Puedo afirmar de lo anterior, uno, el ángel de la guarda de la revolución chavista fue el imperio, él era el mayor comprador de la energía fósil venezolana, antes del gobierno de teniente coronel y siguió así hasta principio de 2019, por decisión de los gringos. Ha sido la principal y casi única fuente de ingreso o financiamiento que ha tenido el Estado. Cuando necesitó gasolina, allí estuvo presente para garantizar que no se parara el país. Por otro lado se han utilizado las Órdenes Ejecutivas emanadas por el gobierno yanqui para acusar del bloqueo y los males, las primeras OE estaban dirigidas a personas, es en el año 2015 se emite la primera que va dirigida personas en específico, posteriormente vienen otras del mismo tenor; el cambio se produce en el año 2018 cuando se persigue a la moneda tipo bitcoin, Petro. Es en el año 2019 cuando se aplican medidas que restringen directamente a empresas del Estado. Entonces, el bloqueo al Estado es de reciente data, las penurias viene desde largo rato afectando todo el territorio.

Como podemos percibir, los interlocutores de esta dicotomía viven en un mundo esquizofrénico. Traigo a colación un artículo que claramente refleja ello, cito este porque es reciente, se puede tomar muchos otros que aparecen en medios dominados por el chavismo u otros que en algún momento fuero y ahora tiene una línea muy abierta, ese aparece en el portal de Aporrea, titulado: Crónica de una muerte anunciada a la industria petrolera venezolana.

Andrés Giussepe¹, comienza describiendo  los errores de gerencia, la fuga de divisas (no se señala corrupción, por algo será), entre otros males, pero al momento de buscar al culpable, aparece la palabra mágica, no está de manera explícita, así escribió:

“Seguidamente, vino el Decreto de Obama de 2015 y el bloqueo financiero internacional a nuestro país, empeorado la situación fiscal nacional. En cinco años, la producción petrolera fue cayendo, pasando 2,5 millones de barriles diarios en el 2015 a menos de 600.000 barriles diarios en 2020.”

Como lo mencioné anteriormente, este decreto fue destinado a incautar bienes, congelar cuentas y otras medidas como que nadie puede hacer negocios con ellos porque son considerados culpables de siete (personas), claro del cogollo, de los cercanos a la cúpula.

Por otro lado, se pasa de largo sobre algo que venía desde hace tiempo, la caída de la producción en el 1999 cuando Chávez asume el poder la producción estaba por los 3,5 millones, según palabras de este autor, para el 2015 ya se producía un millón menos.

En pocas palabras, se acomodan los datos, se evitan temas y se dan cambios del relato por tener que cumplir son sus lectores y allegados.

Pero lo más importante es pronunciar cada cierto tiempo las palabras mágicas. Son palabras que van directo a nuestras emociones, por lo cual no hay una digestión posterior, sino se asimilan y repiten con actos de fe.

Porque al final como lo he afirmado en un texto de mi autoría:

También está el que cree en lo allí anunciado, no confirma, no analiza, solamente acepta como cierta la afirmación, tiene fe en la fuente.

Estos son los fanáticos, los que pueden llegar a defender sin importar lo que defienden, es una reacción instintiva de tribu.” (Cruz, Jorge, 2020)²

Son comportamientos emocionales, algunas veces parecen racionales, pero realmente es solo un revestimiento.

Parte de la explicación nos las trae Carrillo-Batalla³:

“(..) Cabe destacar que antes de la guerra, la estrategia comunicacional consistía en crear enemigos externos –entre ellos, quienes estuvieron detrás de la firma del Tratado de Versalles–, así como adversarios internos del pueblo alemán, dando lugar a fuertes resentimientos históricos y a un antisemitismo de graves consecuencias para la humanidad.

Por los detalles nos podemos imaginar de quienes se habla, es la Alemania de la entre guerra, con Joseph Goebbels como el titiritero que manejaba una grupo de palabras mágicas. Que generaban, por un lado regocijo escucharlas, por reforzar el sentido de tribu, y, en el otro sentido, una odio profundo contra los adversarios que se transforman en enemigos. Los tiempos no han cambiado, tampoco las metodologías para difundir, aunque si los métodos y medios disponibles.

Quiero que quede claro que hay un grupo de términos e ítems que generan esas convulsiones de placer: burguesía, pequeña burguesía, extracción de plusvalía, explotación del hombre por el hombre, superestructura, lucha de clases, entre otros. También están los que han caído en desuso, como por ejemplo: me rememora el título de un interesante libro de André Gorz  Adiós al Proletariado y, por supuesto, la dictadura del proletariado.

En resumen, hemos visto como hay palabras o frases que su aparición en un texto escrito o expresión oral puede generar clímax en el público cautivo, estas son diferentes a lo que se ha llamado neolenguaje, el cual tiene que ver con la resemantización de conceptos, usados como eufemismos, minusvaloración o subestimación de los contrincantes y de la realidad en la cual están inmersos.

Estos vocablos tienen como función principal el amalgamar al redil bajo un lenguaje propio e íntimo, como también se usan de dardos o balas contra los contrarios. Muchos de ellos están presentes en las obras de Carlos Marx, el gran gurú, otros en autores posteriores, seguidores de este judío alemán. El neolenguaje apunta más bien a una simplificación o a romantizar la situación que se vive.

Por último, no es exclusivo de esta corriente, en la acera de enfrente hay otra batería de palabras que cumplen con un uso similar. Esto pudiera ser objeto de otro texto, que por los momentos no está en mi agenda.

_____________________

¹Giussepe, Andrés (2020) Crónica de una muerte anunciada a la industria petrolera venezolana. En: https://www.aporrea.org/energia/a295336.html

²Cruz, Jorge (2020) Fanatismo religioso y laico (I). En: www.jorgecruzo.blogspot.com

³Carrillo-Batalla, Vicente ( Sobre la posverdad. El Nacional.https://www.elnacional.com/opinion/sobre-la-posverdad/

No comments:

Post a Comment