Saturday, September 27, 2014

La ilusión de soluciones



 Jorge Cruz, Caracas 25-09-2014

No puedo negar que yo disfruto enormemente de los actos de los magos. Puedo permanecer por horas viendo como descubren la carta que pensantes, aparecen animales de la nada, cambian de ropa en solo un tris, cortan a personas en partes que se mueven independientemente, y así por el estilo. Son posiblemente una de mis mayores debilidades. ¡Nunca termino de asombrarme!

Claro está, yo sé  que estoy viendo un show, algo que no afecta mi devenir, al terminar la función, todo regresa a su normal ajetreo. No hay secuelas, su presentación solo me deja sonrisas y recuerdo gratos de sus artilugios.

Caso contrario cuando mi vida, mi realidad se quiere manejar con actos de ilusionistas. Esos si generan problemas, peor aún si son para buscar soluciones, que al final solo potencias los anteriores, son, el decir popular: “Pan para hoy, hambre para mañana” o “Pan y circo”.

He iniciado estas letras con lo anterior, porque es lo que me trae a la memoria un titular del periódico; Ciudad Caracas en el día 25 de septiembre de 2014 en su página 6: “Optimizan abastecimiento de agua en Ciudad Caribia”.

Recuerdo que en una reunión previa a su fundación, cuando se estaba discutiendo su viabilidad, un experto en el tema del agua preguntó: “¿Con qué agua se va a abastecer ese proyecto habitacional?”, afirmando luego que, solo había disponible unos miles de litros de dos manantiales que no iban a ser suficiente para tantas personas. Tras esos argumentos se planteó como una alternativa traer una abducción desde la represa de Petaquire, que en principio se pensó pero casi descartó porque era costosa y significaba quitar agua destinada para la agricultura. La conclusión fue que ese proyecto era ya definitivo, que no se debía discutir sobre su viabilidad, era necesario construir en un área de la Zona Protectora de Caracas, cerca del Parque Nacional Ávila (ahora Wairara Repanao).

Es decir, no se tomaron en cuenta los argumentos técnicos, solo la voluntad política (debería afirmar: politiquería) de vender una ilusión de solución para un grupo de incautos, que como a Caballo regalado no se le mira el colmillo. Las penurias vienen después.
De eso se ha tratado el gobierno, vender propaganda sobre soluciones que no solventan nada, solo son medidas de corto plazo, de mucha improvisación, de no respetar los conocimientos o sugerencias técnicas, de perseguir o estigmatizar a todo aquel que levante la voz como pitiyanqui, antipatriota.

Como ahora el hombre-imagen no es tan fuerte como el anterior, la ilusión (y el pase de factura de una terrible gestión) han hecho que se tenga que utilizar otros medios: se convierte en un acto de terrorismo las protestas, se censura a quienes están presente en los medios de comunicación y se ridiculiza y persigue a cualquier persona que exprese medidas a tomar: por ejemplo, la emergencia sanitaria, se ha hostigado al presidente del Colegio Médico de Aragua, se anuncia que era un plan biológico, pero se hace fumigación a última hora en los colegios, se inicia una campaña para prevención, entre otras medidas ,que no dice que sí hay un problema grave de salud.

Han sido tantos los proyectos o ideas manifestadas no concretadas o concluidas. Hace un tiempo atrás dos periódicos se hicieron eco de ello: Las Verdades de Miguel a mediados de octubre de 2010, señaló:

“NÚMEROS. La década perdida. A Chávez le dijeron que en el área de Fuerte Tiuna se pueden construir 50 mil viviendas. Pues bien, que se sepa, las tres etapas de la urbanización 2 de Diciembre (rebautizada 23 de Enero) se construyeron en apenas 3 años y en una superficie mayor a la de Fuerte Tiuna. En el complejo se levantaron 56 superbloques de 15 pisos, unos con 150 y otros con 300 y 400 apartamentos para un total de 9.176; además de 42 bloques pequeños, así como también 17 preescolares, 8 guarderías, 25 centros comerciales, 5 escuelas primarias, 2 mercados, 2 centros culturales, estacionamientos, áreas verdes y de recreación para una población aproximada de 60 mil habitantes. Se trata del más grande de 10 complejos habitacionales (los otros son Urdaneta, Pro Patria, Cútira, Diego de Losada, Cotiza, Atlántico Norte, Simón Rodríguez y las unidades residenciales La Vega, Paraíso y Artigas). Todos construidos en 3 años. La pregunta: ¿adónde piensa el Gobierno meter 50 mil viviendas en Fuerte Tiuna? Vale recordar que obras como la Ciudad Socialista de Santa Rosa (avenida Libertador) y muchas otras se encuentran paralizadas.

EFICACIA. Domingo Alberto Rangel llegó a decirme que Pérez Jiménez fue el mejor ingeniero de nuestra historia. Para muestra un botón: algunas de las obras concluidas durante el trienio 1954-1957: Asistenciales: la Maternidad Concepción Palacios, la Clínica Santa Ana, Casa de Observación de Menores Retén de prematuros, la Emergencia de Salas; los Centros Pediátricos de El Valle y Salas; los hospitales Vargas (ampliación a 600 camas), J.M. de los Ríos, Rísquez, El Valle, Catia, Maiquetía, J. M. España, Eudoro González, Pediátrico de Catia, Vargas de la Guaira (con servicio pediátrico y de adultos), Universitario de Caracas y el Banco de Sangre. Avenidas: Andrés Bello, El Cementerio, Nueva Granada, Sucre, Victoria, Bolívar, Urdaneta, Este Oeste 6 y Oeste 8, Cota 905, Morán, San Martín, Cota Mil (primera etapa), Páez, Fuerzas Armadas, Libertador (primera etapa), Maripérez, Francisco de Miranda, España, México, Los Próceres, Los Ilustres y Paseo La Nacionalidad; la Ciudad Universitaria, el Centro Simón Bolívar; los teleféricos Maripérez/El Ávila/Macuto y Mérida; el Hipódromo de La Rinconada; los distribuidores El Pulpo y todos los de la autopista del Este. La avenida Soublette, en Vargas; las autopistas Caracas-La Guaira y la Regional del Centro (primera etapa); las carreteras Panamericana, El Junquito-Colonia Tovar-Carayaca. Los balnearios: Los Caracas, Playa Lido y el Club Puerto Azul. Los mercados populares: Quinta Crespo, La Pastora, Guaicaipuro, Prado de María, el Almacén Central de Coche, Punta de Mulatos y Maiquetía. Parques y plazas: Parque del Este, El Pinar; Plaza Venezuela y Los Símbolos. Hoteles: Maracay, Tamá, Llano, Alta Vista, Prado Río, El Moruco, Cumanagoto, Humboldt y Tamanaco; y muchas otras obras de interés nacional. Hubo unas que no pudieron ser inauguradas por el derrocamiento de MPJ, pero sí proyectadas e iniciadas durante su gestión: la Siderúrgica del Orinoco, el Puente sobre el Lago de Maracaibo Rafael Urdaneta, la Represa del Guri, los planos trazados para el Metro de Caracas, el cual estaba proyectado para construirse durante el periodo 1957-1962. ¿Qué ha pasado con la revolución cuyas obras públicas, en el mejor de los casos andan a paso de morrocoy, mientras que buena parte de ellas permanece inconclusa y abandonada? ¿La década pérdida? “

Posteriormente en el mes de abril publicó 61misterios, es decir, obras inconclusas de este gobierno, promesas no cumplidas (si desea saber más sobre esto puede revisar en:  http://yavenezuela.com/miguel-salazar-61-misterios-por-resolver-en-el-gobierno-chavista/) .

En el Bloomberg News del 28 de abril de 2014 se hace un listado de 4.381 proyectos, de diversa índole, que no se ha concluido, sin mencionar los que nunca pasaron de ser ideas (si desea saber más sobre esto puede revisar en:  http://www.finanzasdigital.com/2014/04/bloomberg-utopia-agricola-de-chavez-se-marchita-como-un-proyecto-abandonado/ ) .

Como podemos ver ha sido un gobierno que en más de década y media ha hecho menos que Pérez Jiménez en un poco más de 6 años, tal como se puede notar en la primera reseña del semanario Las Verdades de Miguel y con menos recursos por el petróleo.

Cuando los vendedores de ilusiones asumen el poder, luego no lo quieren soltar; tener a millones de seguidores, reales o no, es el mejor público, aunque la realidad golpee a ambos.

Yo deseo que los prestidigitadores se queden en los espectáculos, no que gobiernen un país, porque como el humo, luego queda todo como antes o peor, porque han pasado unos años; más rudo aún si la línea es destruir para supuestamente construir. Es preferible ¡qué se vayan con su circo para otra parte!

Por ello cada vez que se encadenan solo suena en mi esa canción cantada por Héctor Lavoe: ¡Mentiras! Tararatara..

Monday, September 8, 2014

¡¡Es el líder, es el liderazgo!! ¡¡Estúpido!!


Jorge Cruz, Caracas, 3 de septiembre de 2014


Algunas veces nos ponemos tan creativos que intentamos preparar una tortilla sin huevos, para después justificarnos buscando culpables porque no es una. La política y los políticos en Venezuela son una gran muestra de ello.

Nuestra oposición se ha caracterizado por criticar, muchas veces con razón, pero en un alto porcentaje sin argumentos reales. El oficialismo, por su lado, no se queda atrás en esta competencia al más inepto: siempre tiene a mano un chivo expiatorio, el o los culpables de sus desaciertos.

Últimamente se escucha con bastante insistencia que la culpa es porque no se ha seguido el dogma marxista de la necesidad de acabar con el Estado (burgués) y darle el poder al pueblo.

Para mi esta es una tesis errada de principio a fin.
El instinto manda
Voy a empezar aclarando que nos olvidamos de un principio fundamental: somos animales sociales y que tenemos comportamientos que se repiten en todas esas especies (insectos como abejas, hormigas…; mamíferos como primates, felinos, etc.), reseño dos de importancia para este tema: tendemos a construir estructuras de poder, las hormigas tienen reina, obreras, soldados, entre otras y, segundo, un líder que comanda el equipo (macho alfa).

Otro dato importante, hay líderes diversos y no todos son aptos en todos los ámbitos. Traigo un ejemplo para ilustrar. Creo que muchos recordarán el caso de los sobrevivientes de los Andes, del equipo de rugby uruguayo que tuvo un accidente aéreo en unos picos de los Andes. Ellos comentan que a pesar de que uno de los que quedó con vida fue el capitán del equipo, para esta nueva situación no dio la talla, como necesitamos de líderes, otro de los integrantes del equipo tomó las riendas y fue él quien armó la estrategia que los pudo sacar del entuerto.

Otra premisa a resaltar es la que he titulado economía energética; la cual consiste en lo siguiente: todos los animales se movilizan o hacen un desgaste de energía con tal de obtener a cambio una cantidad similar o mayor a la invertida en dicha acción. Si algún animal actúa en contra de ello, por largo tiempo, sólo garantiza su muerte por desnutrición.

Coprotagonistas que no participan
Para entrar en materia voy ahora a tocar la participación. La participación coprotagónica se ha convertido en un eslogan que vende mucho, pero que funciona poco; da caché político, pero los hechos son renuentes a demostrar tal dogma, que solo llega a ser un lema más.

Para analizar debemos observar a los Consejos Comunales, uno de los puntales de la revolución socialista que se ha intentado presentar como meta fundamental y base de la nueva Venezuela en construcción: hacia el Estado comunal.

Voy a aclarar que no voy a atacar todos los aspectos sobre este tema, solo algunos que son indispensables para mi planteamiento aquí.

El primer problema que encontramos, su estructura es horizontal, por lo arriba señalado, que nos demuestra la realidad de ellos, debe haber un liderazgo; más sincero sería tener una tendencia hacia lo horizontal, pero la ley es clara al respecto. Los CC que han funcionado o siguen funcionando es gracias a un líder fuerte y consecuente, las vocería cumplen más un papel legal que real, el líder necesita de algunos ayudantes que son su apoyo para llevar adelante los proyectos, aunque se debe señalar que siempre son pocas las manos amigas y voluntarias. En pocas palabras, los CC que han funcionado lo han hecho en contra de la ley, con una estructura ligeramente o altamente vertical.

El segundo punto es que los CC son electos por asambleas, como una forma de combatir el esquema de la representatividad, pero las vocerías también son formas de delegar, es decir, representatividad. Se puede esgrimir que son electos para ser vocero, pero quien, legalmente, dirige es la asamblea; caemos en otro punto, el asambleísmo. Quienes hemos estado inmersos en organizaciones de diversos tipo sabemos que las asambleas son numerosas en un principio y decrece la asistencia con el tiempo, aquí comienza a influir la economía energética, al inicio se tienen altas expectativas, si los logros no son inmediatos decrece la motivación y con ello la inversión energética, al final quedan unos pocos voceros presentes y con deseos de seguir trabajando, hasta notar que si no se logra nada reina la apatía incluso para los más proactivos. El asambleísmo desgasta, haciendo que cada vez se concentre más la toma de decisiones en los voceros (reales líderes), que también son contados. Esto sucede de manera instintiva, no es que los participantes van o sacan sus calculadoras para medir la cantidad de energía invertida menos la obtenida. Para algunos sus mediciones son de mayor alcance o lapsos de tiempo, eso son generalmente los líderes, el resto “realiza” mediciones de mediano y corto plazo, de ello depende su presencia. La gran mayoría de la población vive el día a día y no hacen planes tan largo en el tiempo.

Otra limitante que tiene la ley, que nos muestra el idealismo en ella presente, que es parte del punto anterior: las vocerías son voluntarias, tenemos dos condicionantes: si es voluntario, lo realizo en mi tiempo libre, primero está lo que implica mis ingresos, mi manutención y de mi familia y, luego, lo voluntario; el segundo, nuevamente aparece la economía energética. La realidad es, conozco de diversos casos en los cuales se viola la ley, los líderes, para poder garantizar una dedicación mayor a “mi tiempo libre”, son contratados por entes del Estado, especialmente Fundacomunal.

Tenemos otra variante de ese mismo fenómeno, lo voy a ilustrar con un ejemplo que conozco. En el lugar donde trabajo se han dado al menos 6 iniciativas organizativas desde abajo, promovida por los trabajadores, en lucha por sus derechos: laborales, seguridad industrial, ocio, entre otras, en todas ellas se encuentran cerca de 15 personas que han estado en su promoción y son participantes activos, algunos de ellos están en hasta cinco de ellas; el resto de personas, casi 400, hace apariciones puntuales, son apenas un 10% de todo el personal activo el que realmente se involucra en estas actividades que son para el beneficio de todos. Es decir, son pocos, que se repiten en las actividades. Yo propongo que se revise a los miembros de los CC y veremos que muchos de ellos eran desde tiempos de la IV participantes activos, con nuevas incorporaciones, pero muchos de ellos han sido luchadores y líderes por largo rato.

Un líder o los líderes de las comunidades son el motor de ellas, pero el liderazgo tiene límites, señalo uno, está demostrado que un líder que puede ser bueno para promover luchas reivindicativas, por un servicio, no necesariamente es bueno para administrar proyectos u otro tipo de labores comunitarias, son contados los casos en los cuales, por ejemplo, se puede encontrar un líder que es bueno como gerente o administrador y tenga un excelente conocimiento técnico sobre el área en la cual se desempeña; ellos son la excepción no la regla.

En pocas palabras, la participación o esa nueva estructura de gobierno donde es el pueblo el que manda, es un sofisma; lo real es que ella va a estar mediatizada por los logros, por las metas que se van alcanzando en el corto plazo para la gran mayoría, ha sido la historia de todos los movimientos sociales y seguirá siendo.

Estos problemas se magnifican con la propuesta del Estado Comunal, tal como lo señala María del Pilar García en su artículo El Estado Comunal y las divergencias alrededor del legado del Presidente Chávez (en: http://www.aporrea.org/ideologia/a194418.html). No es entonces el Estado Comunal o el poder popular los que deben asumir el poder para solucionar los problemas en Venezuela.

Realidad caprichosa
Me pregunto si alguien, de los proponente de estas iniciativas, ha revisado porqué se cayó la USRR, porque los chino o vietnamitas, entre otros, han cambiado sus estrategias de desarrollo; incluso los cubanos, se ha dado una apertura que está atrayendo a cubanos-estadounidenses para realizar negocios. Se tiene que revisar que factores internos hicieron que los movimientos de participación entraran en picada. Se necesita de un análisis serio sobre las causas de esa merma en la participación, posiblemente terminarán (yo tampoco lo he estudiado, por ello no puedo afirmar fehacientemente) por encontrar que la economía energética fue una de las causales.

Todos ellos han terminado en un centralismo, en una élite que gobierna, en un partido que se enquista en el poder, en algunos casos en su peor versión: dictaduras.

Por tal motivo, expreso que no se puede seguir apostando por utopías que están distante de nuestra naturaleza: animales, instintivos, que buscamos sobrevivir como comunidad e individuos, que necesitamos de líderes en los cuales delegar buena parte de nuestro futuro y expectativas.

Aceptemos que no va a ser el soberano quien masivamente tome el poder y que desde ese momento va a asumir su porvenir. Necesitamos de estructuras de poder y de líderes, cualquier otra elucubración sirve como ejercicio mental, pero para tenerla en el papel. El alto número de CC y Comunas me da la razón, son pocas las operativas realmente y no es por falta de reglamentos o por iniciativas individuales o incluso colectivas, es por la naturaleza de ese animal llamado ser humano.

Monday, August 11, 2014

Creo en mí mismo, creador…

Jorge Cruz,
Caracas, 9 de agosto de 2014

Últimamente he estado pensando  sobre mis principios y valores. Yo crecí en un hogar de padres católicos, mi primaria estuvo marcada por dos religiones: la católica y la protestante. En bachillerato mis primeros años la protestante y luego laico. Estando en bachillerato, mi mejor amigo era Testigo de Jehová y luego otro que era anglicano. También, con regularidad nos tocaba leer la Biblia.

A todos ellos escuché, cada uno presentándose como la verdad verdadera. El oír sus debates entre las diversas fe y mis lecturas de la Biblia, en la cual, recuerdo claramente,  un Dios “justo” destruía unos muro de fortalezas (Jericó) para que su “pueblo” masacrara a otro, por supuestamente ser impíos. El Viejo Testamento está lleno de guerras, de matanzas en nombre de un Dios. Todo ello me hizo entender que
ese Dios, no era tan justo como me lo intentaban vender, no era misericorde, ni tan justo, no prevalecía el perdón, sino el asesinato justificado en su nombre.

Por ello a temprana edad, decidí o me convencí que no existía un Dios, empecé a militar en el ateísmo. Años después aparece el marxismo hablándome de la religión como el opio de los pueblos.

El marxismo me mencionó la explotación del hombre por el hombre, de la lucha de clases. Comienzan mis años universitarios, con una formación básicamente marxista (o de izquierda, para los que les encanta
repartir etiquetas). Al mismo tiempo inicio unas reflexiones que me llevan a dudar del marxismo como teoría para aprehender la realidad. Comienzo mi periplo por estudios de 4 nivel, voy a Santo Domingo, allí, con una mayoría de profesores marxistas, incluso varios formados en la Unión Soviética de los setenta, con más ahínco me convenzo que el marxismo no me puede explicar la realidad que era mi “objeto de estudio” por mi formación.

Ya en mi paso por la universidad había tenido contacto con propuestas ambientalistas, estas se van consolidando y mi militancia en ONG ambientales no se hace esperar. Nuevamente el marxismo no me sirve para explicar mis apreciaciones de la naturaleza, las grandes enseñanzas con mis queridos amigos, biólogos en su gran mayoría. No encajaba eso de la lucha de clases con movimientos “culturales” como el ambientalismo o ese torrente de nuevas formas de acercarme a la realidad.

Es decir, fui poco a poco configurando mi verdad, la única que realmente existe para mí, las demás son solo interpretaciones de la realidad en la cual me desenvuelvo.
 
Es una verdad que me dice que las “luchas” son culturales, no son clases que se enfrentan, son liderazgos con seguidores de diversas “clases sociales”, líderes que atraen personas que van conformando una comunidad (algunas veces incluso bajo un solo partido político) que a su vez va creando una cultura (un lenguaje, un discurso, forma de vestir, redes de amistades, entre otras).  Siempre hablan de reivindicaciones: recuperar los derechos perdidos o no alcanzados por  la acción de una “clase” (capitalista para el marxismo), una “raza” (nazismo), una religión (cristianismo en todas sus variantes; islamismo, etc.), una cultura (blancos sobre afros, o grupos como los de Le Pen en Francia), una preferencia sexual (heterosexuales sobre homosexuales) ; basados en esas “razones” justifican el arrasar con el “enemigo”. Se les persigue hasta hacerlos desaparecer, sea físicamente (muerte o cárcel) o económicamente (no se les permite conseguir trabajo o fuente de ingresos).

Esa es mi verdad, ya no creo en izquierda o derechas, ni en dioses, ni clases sociales, solamente soy un humilde seguidor del credo de Aquiles Nazoa. 

Thursday, July 31, 2014

Una plusvalía para ti y la otra también

Friday, June 27, 2014

La intolerancia como marca



Jorge Cruz, Caracas 27 de Junio de 2014

En la puerta de un retén de recién nacidos se encuentra un nigeriano, un alemán y un argentino, la enfermera levanta a un bebe de color oscuro y pregunta por el padre, el alemán inmediatamente responde que es el suyo, el nigeriano sorprendido le pregunta ¿cómo que tuyo? A lo que el alemán responde ¿quieres que me toque el argentino?

Este antiguo chiste, como muchos otro, nos muestran con humor los estereotipos a los cuales nos hemos acostumbrados, con lo cual exteriorizamos nuestro segregacionismo. El segregacionismo no es ajeno a los animales, por ello no debe causar escozor el reconocer que somos participes de ellos, traigo un ejemplo de unas especies distantes que nos reflejan ello: las hormigas, está documentado que entre la alta diversidad de ellas no hay compatibilidad, una hormiga no puede “visitar” un hormiguero que no sea el propio, es repelida e incluso pueden causarle la muerte, aún dentro de una misma especie esto no es permitido. Por ello tenemos chistes de homosexuales, gallegos, negros, chinos, entre otros muchos.

Todos tenemos conductas segregacionistas, ya sean por el color de la piel, por la edad, por el sexo, por la preferencia sexual, por la religión, por la cultura, por el origen, por la afición deportiva, entre otros.

La formación o valores dados en casa son los que nos permiten minimizar este comportamiento, he dicho minimizar, porque nunca desaparece, es instintivo.

Ahora bien, se puede también exacerbar este instinto, muchos líderes lo han utilizado para ganar seguidores, para mantener en el redil a los mismos, para atacar a contrincantes o incluso, como en las hormigas, eliminar, ya sea física, económica, moral o políticamente.

Una de las formas más violenta de mostrar la intolerancia es la desaparición física del oponente, la cual puede ser desde la cárcel, con lo cual logran incomunicarlo con sus seguidores (algunas veces esto puede ser contrario a los objetivos deseados), hasta la muerte. Pero hay otra forma más sutil de desaparición, cuyo mayor representante has sido Joseph McCarthy, la económica: no se le permite trabajar o tener un ingreso, con lo cual puede generar que el asediado pueda cometer suicidio o migración (exilio) a un lugar donde pueda ejercer sus conocimiento y ser remunerado por ello.

En Venezuela en los últimos 15 años hemos estado involucrados en una agudización de nuestros instintos segregacionistas. El presidente Hugo Chávez (QEPD). Él utilizó su posición y los medios de comunicación (especialmente por medio de las cadenas nacionales u obligación de todos los canales de información, ya sea televisivo y radio, de transmitir sus alocuciones) para insultar, atacar o minusvalorar a todo aquel que no pensara como él, se uniformizaba cualquier tipo de crítica, se le tachaba de enemigo, no de crítico, generó diversos apelativos para denigrar: oligarcas, pitiyanquis, escuálidos, majunches, entre otros.

En pocas palabras, aquí operan dos factores, por un lado la personalidad del líder determina las conductas de sus seguidores, él es importante para moldear la conducta de los miembros. Por otro lado, cada grupo humano (comunidad) genera una cultura: forma de vestir o identificarse por su atuendos; un lenguaje propio para la comunicación hacia dentro y distinguir o minusvalorar a los contrarios; una estructura de poder, hay un líder al menos y posiblemente otros mandos medios; y así por el estilo. Las culturas cumplen un doble rol: son agrupadoras que permiten a sus miembros crecer dentro de sus códigos y valores; y es un muro de contención para evitar las fugas, quien manifieste “valores” diferentes es execrado o se auto execra.

Como resultado, en Venezuela la naturaleza de su líder marcó el destino de un partido que se apropió del Estado y desde allí utilizó la intolerancia como forma de poder, aplicando el principio maquiavélico de dividir para vencer o mantenerse en el poder.

Por ello hemos visto como se han destruidos hogares, peleado familias, acabado amistades de larga data, un permanente enfrentamiento entre quienes piensan diferente; así mismo, se ha extendido a otras áreas: recientemente salió un artículo en aporrea.org en la cual un funcionario del IVIC casi suplicaba que se le permitiera investigar con recursos biológicos, se culpan de los errores a los otros y con base en ello se encarcelan a los supuestos culpables, se persigue, tortura o incluso asesina a quienes protestan, todo bajo la misma premisa intolerancia, justificada como vendidos al imperio, antipatriotas o destructores de la ecología nacional.

También hemos sido testigos de la desaparición económica de muchas personas que vivían en esta república, ya por la famosa lista Tascón o las subsiguientes caza de brujas en los lugares de trabajo.

Cómo vemos mucho de estos argumentos o discursos son los mismos que escuchamos a quienes antes estuvieron en el poder, solo cambian los actores, aunque no se puede negar que la exacerbación que se han experimentado bajo el régimen chavista no tiene parangón.

Ha sido una intolerancia que funciona como la marca de un producto, ha sido la forma de gobernar diferente a sus antecesores, muchas de sus acciones están “legalmente” respaldadas, muchas son de golpe suave.

Yo he vivido en este país por más de 40 años, únicamente bajo este régimen, en cuatro ocasiones, me han expresado que debo abandonar este país.

La intolerancia y la segregación son familia, ellas han sido la marca de estos últimos años.

Friday, April 18, 2014

Las autotrampas de eso llamado izquierda



Jorge Cruz, Caracas 17 de abril de 2014

Hay caminos que no se deben transitar, excepto si lo hacemos es por buscar la vía rápida o respuesta fácil, esa que nos saca del atolladero en el corto plazo, pero que se nos convierte en una carga en el mediano y largo.

Lo peor es que muchas veces esas respuestas fáciles se convierten en mitos, esas verdades sagradas; nadie las mira o  realiza un escrutinio de ellas, solo se aceptan y hasta reverencian.

La que se autodenomina izquierda no escapa a esa tendencia, se ha llenado de mitos que le sirven para atacar los sentimientos, pero son torpes al ser sometidos a un análisis. Parte de las culpas las tiene el estar siguiendo a una teoría que surgió en el siglo XIX, que sirvió como herramienta política para poder justificar las protestas de esos movimientos obreros o agruparlos bajo un partido, pero que son básicamente propuestas políticas y se quedan cortas al intentar realizar un razonamiento de la realidad.

Un solo ejemplo, se hace énfasis en los obreros, en nuestros días el sector servicios se ha multiplicado muchas veces para convertirse en una fuerza de tamaño considerable, por lo que seguir esgrimiendo la bandera de obreros del mundo uníos, tal como reza el Manifiesto Comunista,  suena, huele y sabe a naftalina.

Voy a describir algunos de los argumentos o conceptos que la “izquierda” ha utilizado con mucho o poco provecho para alcanzar el poder, pero que se ha demostrado incapaz de poder lograr el paraíso prometido en el comunismo. No son todos, solo algunos, como también utilizo algunos que han tenido mayor éxito en Venezuela.

El enemigo principal
Generalmente cuando leo o escucho a la llamada izquierda me recuerda a una serie famosa hace ya muchos años: La Isla de la Fantasía; porque, como si fueran enanos mentales, gritan: el imperio, el imperio, que genera regocijo entre los espectadores, se reconcilian los descarriados (historias de amor y odio); luego vuelve la rutina, se baja la temperatura y se espera por el próximo llamado del imperio. En Venezuela tenemos otras versiones: El golpe y magnicidio.

Mientras tanto, los guionistas (los que están en el poder) y titiriteros o reales mandamaces , se ríen y disfrutan.

Quienes son los titiriteros, pues nada más y nada menos que las transnacionales. Un buen grupo de ellas manejan presupuestos anuales similares a la suma de varios países africanos y ellas gasta inmensas sumas en hacer cabildeo (lobbying) para imponer sus intereses en las decisiones de Estado; en pocas palabras, son las que realmente manejan la economía y determinan las políticas en los países. Los gobernantes de cada país (incluyendo a los EE.UU.) solo siguen los dictados de tales corporaciones, más aún cuando actúan en grupo (Bilderberg, entre otros).

A  pesar de ello, los militantes de la izquierda solo se refieren al imperio (E.UU., e incluso no reconocen a otros como el alemán, ruso, chino, japonés o Brasilero), es claro que para fines propagandísticos es preferible tener a un “enemigo”, que algo tan difuso como las transnacionales; esto no es útil para fines analíticos y menos aún, para trazar estrategias de lucha.

Por este motivo vemos casos como el venezolano, en el cual se ha atacado y utilizado hasta la saciedad el imperio, se arrinconado y casi extinguido a los empresarios nacionales, pero al mismo tiempo se les ruega a las transnacionales que amenazan con irse, que no lo hagan; se les busca como aliados en todos los procesos de la producción petrolera o se les dan los contratos de mayor peso ingenieril.

 El último señalado es digno se resaltar porque ilustra claramente lo que he querido expresar.

Por mucho años los ingenieros venezolanos, generalmente agrupados en empresas privadas propias, realizaron grandes contratos y obras para el Estado, por ejemplo, la autopista a La Guaira, construida en los años 50, que cuenta con tres viaductos y dos túneles, eran obras que se elogiaban hasta internacionalmente. Casi desde el año 2004, cuando el gobierno brasilero apoyó al difunto presidente Chávez a neutralizar el paro petrolero, Odebrecht (transnacional con origen en Brasil), de ser una simple prestadora de servicios más en el Metro de Caracas, pasó a ganarse todas la grandes obras: puentes sobre el Río Orinoco, construcción de nuevas rutas para el metro, entre otras. (Yo estoy seguro que esto fue parte de los pactos acordados para el apoyo de Brasil, como también estoy seguro que esta y otras empresas que han recibido contratos de diversa índole en Venezuela, han financiado las campañas del Partido de los Trabajadores, en el cual militaba Lula).

Estado como productor
La segunda autotrampa está relacionada al papel del Estado, especialmente estar a cargo de áreas estratégicas como alimentos, salud, educación, entre otras. Me interesa hablar de la primera señalada porque en ella está presente producción.
Si revisamos la experiencia de este tipo de modelo, notamos que son contadas las que han sido exitosas y todas ellas en campos capitalistas. La de los países que en algún momento se llamaron socialistas, en los cuales todas las empresas pasaron a ser parte del Estado, los resultados son desastrosos, por ello Rusia, China, Vietnam, entre otros, están en una etapa de capitalismo bastante agresivo, con sectores privados que están explotando de la peor manera a sus poblaciones y otras más.

Yo conozco dos ejemplos exitosos, ambas en el área de servicio: la Empresa Pública de Medellín (que dependen de la Alcaldía), que actualmente incursiona a escala nacional en Colombia y Embratel (que era nacional) y una del estado de Río de Janeiro que no recuerdo su nombre; la competencia entre estas dos era fuerte, por lo que su servicio era eficiente.

Cuando las empresas de producción son manejadas por el Estado han adolecido de mermas considerables en su producción o deterioro en la calidad de sus productos, esto generalmente sucede por dos razones: ellas se vuelven clientelares (emplean más de lo debido, por lo que los costos de producción se inflan y requiere de subsidio del Estado o se baja la calidad para compensar su excesivo costo); en otro caso, como es casi garantizado la permanencia en el trabajo,  los empleados tienen a descuidar su producción; también puede ser que no hay incentivo para investigar e innovar por lo que sus productos se desactualizan; al no tener competencia, sino monopolio no interesa la calidad y, por último, los cargos gerenciales no se nombran por su excelencia sino por su sumisión al partido o la camarilla de gobierno, que pueden generar deformaciones como, por ejemplo, no saber manejar los inventarios. Ya mencioné que esto se vivió en varios países, pero el último es el caso venezolano, que casi todas las empresas expropiadas están en condiciones de producción deplorables, por lo que sus productos han desaparecido del mercado y han contribuido enormemente a la escasez reinante.

Del dicho al hecho hay mucho trecho, lo que puede ser plausible en lo teórico no necesariamente lo es en su aplicación. Como expuse, la producción de bienes no ha sido eficiente ni eficaz en manos del Estado, tal vez deberíamos buscar otras maneras de producir en lo privado (cooperativas, p.e.) y que el Estado sea lo suficientemente grande para realizar la supervisión necesaria.

La verdad es la que dice la izquierda
Los medios de comunicación no dicen la verdad, incluso se les acusa de guerra mediática. Lo que se esconden en estos tipos de argumentos es el deseo de controlar la información, que solo la “izquierda” tiene o dice la verdad. Los medios generan una población de tontos, que no saben disuadir el bien del mal; sin embargo, lo que sucede es que si la “izquierda” llega al poder utiliza las mismas artimañas y técnicas de propaganda existentes, como los principios de Joseph Goebbels. Por ejemplo, simplificar el mensaje, se habla del imperio y no de las transnacionales.

Se sataniza la educación como formadoras de borregos, cuando se debe formar es una masa crítica. Entre los factores que ayudan a tener una masa crítica está la diversidad de información que permita contrastar, la “izquierda” como poseedora de la verdad intenta monopolizar la información a impartir; es decir, niega uno de los principios para la existencia de un pensamiento crítico, que es otra variante de esa autotrampa, solo la “izquierda” forma el pensamiento crítico.

Soberanía e independencia del capitalismo
Se habla de independencia cuando en realidad se siguen los principios del gran capital. Suramérica es un gran ejemplo, varios gobierno se han declarado progresitas, anti-imperio, pero en realidad se sigue la hoja de ruta que trazó el Banco Mundial para la gobernabilidad, luego de la aplicación del shock económico con las medidas del Fondo Monetario Mundial.

Todos los países que se han declarado progresista están en una carrera por la explotación de recursos mineros, incluso países con una tradición pobre en ese aspecto, tales como Uruguay y Argentina.

En la nueva redistribución que ha hecho el gran capital de las ventajas comparativas (dedícate a lo que eres bueno o tienes como ventaja con relación a otro países) es que los países “menos” desarrollados suplan de materia prima, especialmente minerales, a los “más” desarrollados. En pocas palabras, una etapa de neoextractivismo, como le han llamado algunos autores.

Venezuela ha sido el extremo de esa tendencia, desde la llegada al poder del chavismo, hace más de 15 años, se ha dedicado a destruir la industria nacional y dedicarse a explotar petróleo; peor aún, hacia los EE.UU. exporta petróleo que luego compra refinado.

No ha habido intentos de realmente  de ser independientes, sino de cumplir con los designios del gran capital, aunque el discurso pareciera ser lo contario; porque la propaganda al respecto juega un papel importante: crear la ilusión de soberanía e independencia.

El modelo que se pregona, socialismo, no tiene una visión clara de que se busca, ni a lo interno y menos a lo externo, por ello solo siguen las reglas de juego que marcan las transnacionales y con ello el capitalismo mundial.

Acabar con la exclusión sociopolítica y económica
Para el quinto caso voy a utilizar como su mayor exponente a Venezuela, por estar inmersa en una “revolución socialista”: combatir la exclusión. Uno de los temas que más se argumentan en la “izquierda” es la existencia de una exclusión social, hay sectores que no tienen derechos o son violentados permanentemente, sus reclamos por medio de protestas son la expresión de lo que llaman Lucha de Clases, que teóricamente debería ser la toma del poder por la clase explotada, no de un partido o grupo que se autodenomina representante de la clase obrera (que generalmente vienen de la clase media).

Esto es parte de la teoría política de Carlos Marx, hay un pequeño grupo de explotadores y una mayoría de explotados, poseedores de los medios de producción y “manipuladores” de los medios de producción, que al realizar esta acción generan plusvalía que es acumulada por los dueños de los medios de producción.  Esta apropiación da pie a una exclusión de los últimos, apenas sobreviven e incluso hay los lumpenproletariado, que están totalmente marginados de un empleo o de una vida mínimamente digna.

Supuestamente, al acceder al poder esta gran mayoría se revertirían los roles y se llegaría a un estado en el cual no habrían clases.

Venezuela ha tenido en el poder por un lapso de 15 años a un grupito que dirige la revolución socialista (gracias a los ingentes ingresos petroleros). Son un grupito que se reparten varios puestos de la burocracia (se pasó de tener 16 ministerios en el 1998 a 36 en 2014) y también entre varios de la misma familia, ha habido más de dos hermanos en cargos de alto rango en el Estado.

Pero allí no acaba la historia. Este grupito que supuestamente ha intentado acabar con las exclusión social (se arguye que no se ha abolido porque se está en una transición, que es un proceso que está en construcción), aunque ha generado otro tipo de exclusión: política, todo aquel que no esté en el partido de gobierno es perseguido o calificado de escoria: oligarca, pitiyanqui, escuálido, majunche, entre otros. No se aceptan críticas (tienen la verdad), cualquier pensamiento contrario es calificado de derecha.

Menos aún que proteste, no se tienen derechos políticos, al menos que digas que estas con la revolución. Las protestas que se han sucedido en Venezuela desde el 12 de febrero han sido reprimidas de la peor manera: muertes por balas u otros medios, torturas, envío de los jóvenes que protestan a cárceles donde se recluyen a personas con historial delictivo o de asesinatos, destrozo de puertas o rejas para el ingreso a edificios o viviendas, destrozo de vehículos estacionados en las vías. En otros artículos que están publicados en el blog: www.jorgecruzo.blogspot.com se pueden leer artículos que describen en algunos casos la represión.

Si bien es cierto, que el país señalado estaba en una crisis en la cual la separación entre los sectores poderosos y el resto era cada día más distante, en la cual si habían dos Venezuelas, una que acudía a la educación y salud privada y la gran mayoría que no sufría un viacrucis para poder ser curado o a una educación pública cada vez en peores condiciones; ni hablar de la desnutrición o alimentación deficiente de los mismos. La llegada del Chávez fue un respiro en cuanto a programas sociales, se les llamó misiones; pero su objetivo no era mejorar las condiciones del país, fue acabar con los partidos políticos contrarios (ver Lo Político Primero, en el blog citado).

Por ello se pasó de una exclusión social a una política; porque al final, en todos los países que han instaurado el socialismo ha sido la tónica, tener un solo partido que está en el gobierno y perseguir a cualquier tipo de oposición. Es decir,  se ha utilizado el pensamiento de izquierda para justificar o mantenerse en el poder.

En pocas palabras,  no es cuestión de eliminar las clases sociales, es de asumir el poder y permanecer en él el mayor tiempo posible. Nunca ha estado realmente en la agenda el acabar con la exclusión social, política o económica, ha sido solamente un excusa para acceder al poder, ya que es la izquierda la que tiene la verdad.

La participación como panacea
Por último otra autotrampas: la participación de los sectores populares.  Esta hipótesis alega que es necesario que TODOS participen en la construcción de su entorno, desde su vivienda hasta el país. El problema con esta propuesta es que se olvida que somos animales gregarios y, como tal, tendemos a delegar en el líder la toma de decisiones, en el macho alfa recae la ruta a seguir.

Otro tema que se relega es la economía energética, las personas se movilizan en función de obtener mayor cantidad de energía que la invertida en su obtención (si yo gasto consuetudinariamente más energía de la que recupero, llega el momento en el cual tengo deficiencia energética); por lo tanto, si percibo que no voy a tener un superávit energético no me movilizo.

Con ello quiero decir que la participación es diferenciada, algunos ponen más tiempo y energía en la acciones a seguir, que todos responden a su interés personal (que generalmente es su primera comunidad: la familia directa, no necesariamente el trio de padre, madre e hijos, sino que incluye a otra línea familiar como los padres,  hermanos, entre otros), en primera instancia, luego a su comunidad (aquí me refiero a la que generalmente se utiliza como concepto en la ciencias sociales); que quienes invierte más deben estar buscando prebendas, ya sea acceder al poder o premios.

En Venezuela también se han estado hablando con fruición de la corresponsabilidad y participación protagónica. Las figuras cumbres de esto son los consejos comunales y la comuna (un agregado de CC). La ley para los primeros exige porcentajes de participación en asambleas, que como autoridad máxima, es la que toma decisiones para el área de influencia. El gran problema es que se cae en un asambleísmo que cansa tanto a los que fueron elegidos voceros (delegados por áreas de interés), como el resto de la comunidad. Por ello, más son los CC que funcionan en el papel que en la realidad.

No voy a profundizar en otros problemas de los CC como voluntarismo, horizontalidad… porque me llevarían a otros lares.

Conclusiones
Mientras los teóricos y pragmáticos de la “izquierda” continúe sin preguntarse o reescribir su hipótesis de trabajo, tendremos lo que hemos tenido: movimientos (realmente partidos) que han dirigidos revoluciones que al final solo logra que otra camarilla se atornille al poder.

Es más cómodo seguir donde se está, pero al final sólo obtendrán frustraciones porque únicamente el gatopardismo es el triunfador.

Al final la izquierda se parece tanto a la derecha, o posiblemente es más siniestra.